No solo me paso a mi....

Vestidonovia/bodasjuliethbravo

 

Después de mi pasado post en el blog acerca del lindo blanco estorbo, pude llegar a escuchar varias historias parecidas a la mía donde invirtieron un gran suma de dinero en su espectacular vestido de novia y ya han pasado varios años esperando a poder darle de nuevo uso con un familiar o una amiga. Sin embargo, el pobre vestido sigue esperando.

 

De hecho, para quienes lo tienen guardado, un tip importante es que le entre un poco de aire y luz, cada 6 meses o una vez al año para que no se empiece a amarillear o a llenarse de hongos.

Quise proponer una serie de preguntas para las que lo tienen guardado y ayudarles un poco con la decisión sobre qué hacer con él:

  1. Hace cuanto lo tienes guardado

  2. Hace cuanto no ves en qué estado está?

  3. Lo lavaste antes de guardarlo ?

  4. Sabías que la mejor forma de guardarlo es en una caja del mismo tamaño del vestido, envolverlo en una tela o papel seda azul oscuro (para evitar que se ponga amarillo)?

Si te pasa como a mi que no tengo suficiente espacio en mi armario para poner una caja del mismo tamaño del vestido, puedes ser recursiva y envolverlo en una bolsa negra, puede ser las de la basura y sobre ésta poner el forro original con el que te entregaron el vestido .

Ahora que ya has respondido a esta preguntas, tu próxima tarea no sólo es saber en qué estado está tu vestido, sino decidir de una vez qué vas a hacer con él.

 

Volviendo al tema de las mil historia de novias que siguen guardando su vestido; no sólo me tomé el tiempo de escucharlas y averiguar en dónde se encuentra su vestido de novia y aproveché para preguntarles en dónde lo habían adquirido. La mayoría se enamoraron de la experiencia y el romanticismo que es entrar a Pronovias ó a Rosa Clará. Otras decidieron no invertir una fortuna y se montaron en un avión y lo compraron en Miami, pues para las que no saben, SI! sale más económico y de paso puedes empezar a comprar cosas para tu nuevo hogar, aunque ahora con la subida del dólar no sé qué tan viable sea esta opción para las futuras novias. Otras optaron por alquilarlo con la modalidad de estrene-alquile, esta opción es muy llamativa para las novias ya que “tienen el vestido con que soñaron pero sólo lo tienen por el dia de la boda”. Yo, personalmente, no soy muy fan de mandar hacer ropa y creo que no contemplé siquiera la opción de mandar hacer mi vestido, porque siempre crees que te va a quedar tal cual al que llevaste de muestra y la mayoría de las veces no es así, no obstante, a muchas les funciona muy bien esta modalidad; por última opción las novias se enamoraron de un diseño que vieron y lo mandan hacer con una diseñadora amiga de la familia.

Ya para concluir, a las futuras novias les aconsejo que, si no quieren invertir una gran cantidad de dinero en el vestido, les recomiendo buscar a novias que quieran vender el suyo y así empezar a darle un uso y un propósito a los fieles acompañantes y cómplices del día más lindo de nuestras vidas como mujer.

Y a las que lo tienen guardado, miren en qué estado está el vestido antes de ofrecerlo, sean conscientes que si los compraron hace 10 años por una suma grande no es posible que puedan ofrecerlo por la misma cantidad en que lo compraron .